Lavar los platos a mano es una tarea que muchas personas hacen a diario. Aquí te dejo algunos consejos para lavar correctamente los platos a mano:
Prepara tus utensilios: Reúne todo lo que necesitas antes de comenzar a lavar los platos, como el jabón para platos, una esponja o cepillo suave, y un paño de cocina limpio y seco.
Elimina los restos de comida: Antes de lavar los platos, raspa los restos de comida y elimina los residuos grandes.
Prepara el agua: Llena el fregadero con agua caliente y agrega jabón para platos. La temperatura del agua es importante, ya que el agua caliente ayuda a descomponer la grasa y la suciedad.
Comienza a lavar: Sumerge los platos en el agua jabonosa y comienza a lavarlos con una esponja o cepillo suave. Asegúrate de limpiar todas las áreas, incluyendo las áreas difíciles de alcanzar como los bordes y la parte inferior de los platos.
Enjuaga los platos: Después de lavar cada plato, enjuágalo con agua caliente para eliminar todo el jabón. Asegúrate de eliminar cualquier resto de jabón en la parte inferior de los platos y en las esquinas.
Seca los platos: Después de enjuagar cada plato, sécalo con un paño de cocina limpio y seco. Si tienes un estante para secar platos, coloca los platos allí para que se sequen.
Limpia y seca el fregadero: Cuando hayas terminado de lavar los platos, vacía el agua jabonosa del fregadero y enjuágalo con agua limpia. Limpia el fregadero con un paño limpio y seco.
Siguiendo estos sencillos consejos, podrás lavar correctamente los platos a mano y mantenerlos limpios y brillantes.
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